HISTORIA
El año 2014, culmina para el Perú el último diferendo limítrofe de nivel internacional y recién a esta fecha se puede configurar el territorio de la República en su integridad. Durante el siglo XX, se lograron los acuerdos de límites terrestres internacionales con importantes pérdidas territoriales, comparado con la superficie con que nace la República del Perú; y, en la segunda década del siglo XXI, se logró definir los límites marítimos internacionales incluso con participación de la Corte Internacional de Justicia de La Haya. Respecto a la organización territorial interna, a dos siglos de vida republicana, el Perú aún mantiene muchos retos. Aproximadamente el 75% de sus circunscripciones político-administrativas no cuentan con límites establecidos por ley y se configuran únicamente a partir de límites referenciales con consecuentes diferendos limítrofes internos y una permanente toma de decisiones sustentadas en la informalidad territorial. Las progresivas creaciones de circunscripciones poco funcionales, con evidentes matices únicamente políticos, constituyen también un reto en el intento de configurar circunscripciones racionales. Del mismo modo, ante la incapacidad para crear regiones político-administrativas se consolidan burocracias departamentales que por mantener cuotas de poder debilitan el proceso de regionalización. La presente investigación, haciendo uso del análisis histórico, desarrolla los más relevantes procesos de configuración y reconfiguración territorial sucedido entre 1821– 2021, los cuales explican la actual organización territorial del Perú.
Este artículo estudia la naturaleza de las relaciones Perú-Estados Unidos durante el período 1963–1975 a través de un análisis de la disputa por la potencial expropiación de la International Petroleum Company, de propiedad estadounidense. El gobierno de los Estados Unidos implementó una política dura hacia el primer gobierno de Fernando Belaúnde – quien buscaba una relación “especial” con los Estados Unidos – caracterizada por la amenaza de sanciones económicas si el gobierno peruano no solucionaba el problema a favor de la empresa. La amenaza de la Enmienda Hickenlooper, que buscaba penalizar a los países que expropiaran empresas estadounidenses, fue una clara señal de ello. Una vez que la empresa fue expropiada por el Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas en 1968, el gobierno estadounidense se vio irónicamente obligado a seguir una política más flexible, ya que el nuevo régimen militar buscaba diversificar sus relaciones bilaterales en el contexto bipolar de la Guerra Fría. La política estadounidense de apoyo al IPC tuvo efectos negativos a largo plazo para los intereses estadounidenses en la región, ya que aceleró el derrocamiento de Belaúnde y marcó el comienzo de la llegada de una junta militar que buscaba una política exterior más independiente. Un país que había estado sólidamente en el campo estadounidense desde el final de la Segunda Guerra Mundial se había convertido en una nación no alineada.
RELACIONES INTERNACIONALES
Esta contribución indaga por los elementos impulsores del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre China y Perú. Para ello, el artículo dimensiona la importancia de la cooperación bilateral en el devenir de la relación sino-peruana. Dado que la presencia china en Perú no es un fenómeno reciente, la pieza busca identificar la incidencia de la influencia china en la relación con Perú y su importancia en la construcción de la narrativa oficial de los tomadores de decisión peruanos sobre la imagen transpacífica que quieren proyectar particularmente hacia China. Para ello, este artículo concibe el poder desde una concepción productiva, focalizando principalmente los elementos intangibles para indagar por los planteamientos discursivos de los agentes peruanos y las prácticas derivadas de la relación sino-peruana. Este artículo concluye que los temas nucleares de la cooperación bilateral permiten identificar cuatro etapas orientadas por la política internacional china hacia Perú. Aunque la naturaleza misma de la relación sino-peruana no yace ni se explica exclusivamente en criterios económicos ni desde una lógica institucional, el estado actual de la asociatividad entre los dos países responde al conocimiento recíproco a partir de las oleadas migratorias de la población china en momentos de estrés económico y político. Contemporáneamente, los discursos y las narrativas construidas por parte de los agentes tecnócratas peruanos reconocen la identidad transpacífica del país. El peso de China en esa identificación es constitutivo de la narrativa de Perú como país puente en los noventa y de las prácticas asociadas a la búsqueda de su reconocimiento como el centro de operaciones de Suramérica para Asia en el siglo XXI.
En conmemoración del bicentenario de la independencia del Perú el presente artículo examina los principales hitos de la evolución de las relaciones bilaterales entre Rusia y Perú en el contexto de la política exterior, histórico, cultural y especialmente de la ciencia. Considerando los nuevos datos de archivo introducidos recientemente en la primera parte del estudio, el autor aclara algunas de las circunstancias de los primeros contactos interestatales entre la República del Perú y el Imperio Ruso, profundizando las cuestiones de comunicación intercultural. Además, guiado por un enfoque interdisciplinario, examina detalladamente el período anterior al establecimiento oficial de las relaciones diplomáticas de la Unión Soviética con el Perú en 1969. Asimismo, desde el punto de vista de la diplomacia académica y con énfasis en su dimensión humanitaria, se analiza la formación y el desarrollo de los estudios de investigación del Perú en el ámbito de la ciencia nacional. Finalmente, se destaca brevemente el estado actual de las relaciones ruso-peruanas en clave de la diplomacia estatal y pública.
Desde inicios del siglo XXI, Rusia ha procurado recuperar el estatus de gran potencia en la política internacional, aunque dejando detrás su perfil ideológico que le era propia durante la era soviética. Si bien es cierto, la influencia rusa en América Latina aún se encuentra lejos de alcanzar los niveles de Estados Unidos, la Unión Europea o China, recientemente, Moscú ha logrado incrementar su presencia en la región. A su vez, el Perú aspira posicionarse como una “potencia regional emergente”, con una importante proyección económica hacia el Asia Pacífico, aunque manteniendo –por ahora– su alineamiento estratégico con Occidente. Luego de describir los principales hitos de la relación histórica entre el Perú y Rusia –como imperio, república soviética y república post-soviética–, el presente artículo busca identificar la dinámica, así como los principales ejes de la relación bilateral del siglo XXI. Llega a la conclusión de que, con la excepción de la histórica provisión de armamento ruso al Perú, los vínculos entre ambos Estados han sido de una intensidad relativamente baja, a raíz de la identidad internacional, convergente con Occidente, del Perú; una imagen generalmente desfavorable y/o errónea de Rusia entre las élites del país; así como la tendencia de economización en su política exterior contemporánea.
POLÍTICA
Las medidas que han tomado el Gobierno peruano para contener el coronavirus no han impedido la expansión del virus durante los meses de la cuarentena. Las políticas que se han implementado para reducir los efectos económicos del Covid-19 sobre las empresas y trabajadores muestran que el modelo neoliberal pre-Covid-19 no fue ajustado para enfrentar la crisis económica, social y sanitaria. Los intereses del capital se mantuvieron como las principales guías para la toma de decisiones por parte de la clase gobernante. Este trabajo sostiene que las restricciones económicas y políticas impiden una transformación del estado en el Perú post-Covid-19. El triángulo dialéctico del carácter dependiente de los países periféricos, las expresiones internas de la estructura económica y empresarial de la dependencia, y las particularidades del estado en la periferia del capitalismo mundial, proporcionan el punto de partida teórico para nuestro análisis sobre la continuidad del estado neoliberal en la sociedad peruana post-covid-19. Las restricciones económicas se refieren al papel del Perú en la división internacional del trabajo, el poder del capital extractivo, la debilidad económica de las pequeñas y microempresas, y los intereses económicos del aparato burocrático estatal. Las restricciones políticas se relacionan con el poder político del capital en el aparato estatal, la debilidad política y social de las fuerzas progresistas que apuntan al cambio social y los intereses políticos de la burocracia estatal peruana.
El artículo examina el desarrollo de la estrategia energética del Perú en el contexto de las tendencias globales de transición energética. En laúltima década, el sector energético del Perú hacrecido rápidamente debido a una mayor demanda interna impulsada por el crecimiento económico del país. Actualmente, el país tiene el objetivo de ampliar elsistema energético para brindar acceso energético y almismo tiempo modernizarlo, teniendo en cuenta las tendencias transformadoras del sector energético global en el contexto de la agenda climática global y los desafíos de la descarbonización. Los riesgos que plantea el cambio climático podrían tener un impacto negativo significativo en el ecosistema de Perú y plantear serias amenazas para el futuro del desarrollo económico del país. Los autores analizan el estado actual y las perspectivas de desarrollo del sector energético, que es el principal motor del crecimiento económico nacional y un factor importante para el desarrollo de la población y la erradicación de la pobreza. El artículo estudia los fundamentos de la estrategia estatal de desarrollo energético, el papel de la agenda climática y los detalles de los proyectos de regulación en el campo de las energías renovables. Los autores concluyen que Perú tiene un potencial significativo tanto en el campo de la energía tradicional de hidrocarburos, incluido el GNL, como en el campo de las energías limpias. Además de la energía solar y eólica. Perú también tiene un potencial significativo para convertir a biocombustibles los residuos de biomasa no utilizados. Otro sector prometedor es el desarrollo de la energía de hidrógeno. De particular importancia para el país es laindustria delgas, que recibió ungran impulso para eldesarrollo debido a la implementación del gran proyecto Camisea. Durante un período de transición en la que la energía renovable, no pueden satisfacer plenamente las necesidades energéticas de la economía, el aumento de la producción de gas natural puede reemplazar parcialmente el uso del petróleo en la industria, la vivienda y la generación de electricidad, lo que puede contribuir significativamente al logro de los objetivos estratégicos de descarbonización. La elección de prioridades estratégicas determinará la arquitectura energética del país a mediano y largo plazo.
El fenómeno de movilidad en el Perú ha determinado una cosmovisión propia de peruanos y peruanas que hacen la distinción entre trabajo y Estado. El enfoque de género ha sido un particular tema debido a los subsidios del Estado Alemán, lo cual se convirtió en un estigma entre quienes acceden a este beneficio y quienes no. Esta era una diferencia bien marcada entre los que de alguna manera se habían adaptado a la vida laboral en Berlín. Y por esto, muchos de los peruanos que trabajan se han ganado la confianza de mucha gente germana. He incluso muchos de ellos se ganan el aprecio y la estima de los paisanos peruanos y latinoamericanos, de hecho, el prestigio. Sin embargo, es necesario entender también en este contexto, que son los nuevos estilos de vida, que también pasan por el trabajo y la cotidianidad, las que llevan al enfrentamiento entre peruanos consanguíneos y familiares generando rupturas profundas.
La República del Perú celebró su bicentenario el 28 julio de 2021 con inestabilidad política, problemas económicos, un movimiento narco-terrorista, alrededor de un millón de refugiados venezolanos, y la pandemia del COVID-19. Aunque la nación andina tiene muchos aspectos asu favor que deberían ayudar aque elpaís tenga unamayor imagen internacional, el peso geopolítico de Perú es limitado. En este ensayo, discutiremos los principales factores que son tomados en cuenta para catalogar a un país como una potencia regional. Asimismo, se ofrecerá una hoja de ruta que el Perú puede utilizar para incrementar su imagen internacional de cara al tricentenario. Estas recomendaciones incluyen que las Fuerzas Armadas peruanas tengan un rol de liderazgo en las misiones de paz de la Organización de las Naciones Unidas (ONU); que el Perú tome a la Comunidad Andina de Naciones (CAN) bajo su dirección para que el bloque obtenga más relevancia, además de sugerencias estilo “soft power.” Igualmente, es necesario que, en el Perú, no solo el Poder Ejecutivo, sino también los diferentes sectores estratégicos, tengan la ambición de lograr que el país llegue a ser una potencia regional. En el 2021, en una Latinoamérica fragmentada, sin claros líderes regionales, y con problemas como la pandemia y la situación en Venezuela, hay lugar para el surgimiento de una nueva potencia regional. El Perú podría alcanzar ese lugar, si es que tiene la ambición y visión estratégica a largo plazo para lograrlo.
ISSN 2658-5219 (Online)